LOS GOLPES BAJOS DE LA INFIDELIDAD
El otro día vi el último vídeo subido por WALTER RISO, catedrático de psicología, con especialidad en terapia cognitiva y bioética, autor de reconocido prestigio y uno de los grandes especialistas en relaciones de pareja
Sus opiniones siempre van directas al origen del problema sin anestesia, ni rodeos, para de este modo invitar a la reflexión y toma de conciencia
En el vídeo hace una acertada observación sobre LOS GOLPES BAJOS DE LA INFIDELIDAD
Algo que según Riso ha visto en infinidad de ocasiones en su consulta
Y ponía un ejemplo: imagina que un hombre engaña a su mujer y esta lo descubre. Además de descubrirlo éste lo reconoce; lo cual según el autor es muy poco probable ya que las personas que engañan no suelen reconocerlo, y deciden emprender un tortuoso camino de disculpas cada cual más disparatada
Pero en el caso de hacerlo, porque no le queda más salida, es HABITUAL en este tipo de personajes culpar de su infidelidad o deslealtad a la persona engañada a través de un perverso juego de manipulación: "tú no me entiendes, eres indiferente o demasiado controladora, no me siento libre, no me das lo que necesito, me siento solo, sola..."
Es decir, una cascada de críticas que viene a añadir dolor al dolor provocado porque además pretenden que asuman una culpa injusta que no es de ellas
Como señala Walter Riso, una persona no se levanta de un día para otro y decide engañar. Hay un proceso hasta culminar ese engaño
Un tiempo
Debo decir que en ocasiones solo es una infidelidad sexual. Un encuentro anónimo una noche cualquiera
Sin embargo, la mayoría de las veces existe un recorrido hecho a conciencia a espaldas de la confiada pareja
Miradas cruzadas, atracción física, teléfonos intercambiados, conversaciones sostenidas en el tiempo, intimidades confesadas, traiciones de facto hablando mal de la relación o de la compañera/o (otro clásico universal de todo infiel), encuentros... y culminación sexual o no
Eso ya no importa. Se ha producido la infidelidad más dolorosa; la emocional. Aquella que implica deslealtad, humillación y una lista interminable de mentiras para no ser descubiertos/as
En este indigno viaje, si la persona desleal funcionase desde un mínimo de conciencia y respeto hacia su leal pareja podría, si hubiese querido, darle una oportunidad a su relación o al menos, como indica Riso, otorgarle a su pareja, con la cual tenía un pacto afectivo sexual de lealtad, el DERECHO A LA INFORMACIÓN
Porque ese pacto implícito de apoyo mutuo y honestidad ha sido roto y la parte dañada tenía al menos ese derecho a saberlo todo desde el principio, justo cuando empezaron a sonar las alarmas y comenzó la relación con la tercera o el tercero en discordia
Sería lo justo y abriría una oportunidad para salvar la relación o transformarla en amistad tras la ruptura o negociar un nuevo pacto que sea en igualdad de condiciones para ambas partes, pasando de una relación de exclusividad a una abierta (pienso que es mal abono para el amor pero hay a quien le funciona)
Si tu pareja quiere conocer y coquetear con otras, tú deberías poder hacer lo mismo. Conocer y coquetear con otros hombres sin informar a tu compañero
Pero si deseas seguir en una relación de exclusividad debes tener presente, como dice el profesor Walter Riso que la fidelidad no es que no te guste nadie más. Es AUTOCONTROL Y EVITACIÓN A TIEMPO, y cuando nos empieza a gustar otra persona decir va de retro satanás y alejarnos porque valoramos lo suficiente lo que tenemos en casa como para arriesgarlo por algo que quizá sea solo efímero
En muchas ocasiones uno/a comprende el valor que tenía su pareja cuando ya la ha perdido para siempre
Así funcionan las lecciones de vida
Por último, comparto tomografías hechas en laboratorio por neurofisiólogos de los campos de frecuencia que emite el cuerpo según la emoción o el pensamiento
Si somos sinceros vibramos en altas frecuencias. Emitimos luz
Si mentimos vibramos en bajas frecuencias. Nuestra luz se apaga. Somos oscuros
¿Quién deseas ser?
Alguien con luz
o
Alguien oscuro
Porque lo semejante acaba atrayendo lo semejante y alejando lo antagónico