EL SENTIDO DE LA VIDA
El otro día tuve el privilegio de visionar el nuevo proyecto de ARTURO PRINS, un largometraje experimental sobre el sentido cósmico de la existencia humana. La génesis, el destino más allá de las estrellas. De vuelta al lugar al que pertenecemos, el vasto cosmos
Una cápsula en el tiempo para generaciones futuras, si el transhumanismo que ahora impera y busca fagocitar nuestra humanidad con los cantos de sirena de la inteligencia artificial nos deja un resto de conciencia primigenia
Desde la atalaya del edificio Luxembourg en Niza, el autor observa escenas cotidianas de belleza encarnada y un intenso azul desapegándose del yo egoico que vive apegado a la materia de una forma salvaje, devorado por lo perecedero, alejándose del sentido de la vida
Esa que nos recuerda, más allá de esta realidad de necesidades volátiles que no se asienta y a ratos hiere de forma profunda, que somos parte del universo, polvo de estrellas, eones de sabiduría que danzan en perfecta armonía, incluso ante el aparente caos
Necesitamos un cambio de paradigma, darle una dimensión más amplia a nuestra existencia. Dejar de buscar en lo fútil el sentido de la misma
Sería bonito volver a la cueva, al origen, a la visión microscópica, a la chispa mágica que produce vida
Recordando nuestra divinidad, nuestro lugar en la infinidad de la inteligencia universal que todo lo gobierna en perfecta armonía
Somos energía, luz, CREAtividad...estrellas
El amor es la respuesta
Y hoy más que nunca, es el lugar en el cual deberíamos residir
El último bastión que la inteligencia artificial no podrá emular jamás